La Liga, en conferencia de prensa, le contestó a los árbitros
"Un paro también es una forma de hacer violencia"
El presidente Sergio Suárez habló para los medios santafesinos en referencia a la huelga de los árbitros. Se quejó de la ruptura que provoca la medida de fuerza y sostuvo que no contribuye en nada para frenar la violencia.
Julián Monzón
Con la presencia del presidente Sergio Suárez, el vicepresidente Esteban Quevedo, el secretario Marcelo Doyharzábal y el tesorero Rodolfo Prendes, la conferencia comenzó con la lectura de un comunicado que a continuación transcribimos:
"El Consejo Directivo de la Liga Santafesina, reunido en el día de la fecha en su sede de calle Corrientes 3049, expresa a la opinión pública:
1. Su más profundo rechazo a todo acto de violencia en los estadios, solidarizándonos con apoyo de distinta índole para los que la hayan sufrido.
2. Reafirmar nuestro compromiso de años trabajando en pos de erradicar de nuestras canchas todo acto de violencia, sea éste llevado adelante por público, dirigentes, técnicos, jugadores, etc.
3. Seguir trabajando en mejora de todos y cada uno de los estadios.
4. Seguir trabajando para contener a casi 1.000 chicos y jóvenes que, semana a semana, practican el deporte más popular, bregando por la continuidad de esta actividad.
5. Expresamos nuestra total disconformidad a cualquier decisión unilateral sobre adopciones de medidas de fuerza que entorpezcan las buenas relaciones necesarias para concretar soluciones, que beneficien al conjunto y no a un sector en particular, convencidos de que el diálogo y la construcción colectiva son los medios más idóneos para la superación de los conflictos.
Continuamos abiertos al intercambio de ideas y opiniones con la predisposición de siempre".
Sin conseciones
Según Sergio Suárez, este comunicado (firmado por diversos delegados de los clubes) expresa sintéticamente el pensamiento de la mayoría de los dirigentes de la Liga. Luego de la lectura del mismo, el titular liguista agregó: "Creemos que a la violencia no se la combate quedándonos en nuestras casas y esperando que surjan soluciones mágicas. Porque la mejor forma de solucionar nuestros conflictos es atacándolos. Sentados, con una posición cuasi pasiva, no sirve de nada porque luego del paro seguramente nos encontraremos sin ningún tipo de soluciones".
A su vez, explicó que en la reunión del día lunes se habían puesto puntos en común sobre la mesa y que el planteo del paro "nos ha descolocado, porque entendíamos que entre todos teníamos que buscar una solución. Acá parar el fútbol es darle de comer más a los violentos. Entendemos que esto se maneja de otra forma, no es muy ortodoxo este tipo de medidas, sobre todo cuando se trata de una forma tan unilateral. El lunes habíamos propuesto una serie de cambios y nos encontramos el día miércoles con un escrito que tenía por principio no dirigir. O sea una ruptura de diálogo y una medida que en lugar de acercar o tratar de coayudar para solucionar esto, marca una distancia mayor. Pero la situación es ésta, estamos sin fútbol, porque sin árbitros no se puede jugar y tendremos que reprogramar para más adelante la fecha de este fin de semana".
Entre los puntos sobresalientes del petitorio arbitral figura el incremento de la seguridad, tanto en los partidos de primera como de inferiores, y un mayor compromiso del Tribunal de Penas, en cuanto a las sanciones de jugadores. Al respecto, el presidente de la Liga opinó: "Todos tenemos que mejorar, todos tenemos que aceptar que una parte de culpa tenemos. Pero tenemos que tener la base en esa aceptación. Porque si no parece ser que el malo siempre es el otro y no es así. Todos tenemos falencias y la única forma de erradicar algo que está inserto en la sociedad y no en el fútbol solamente es habiendo trabajo de equipo. Este tipo de medidas, supuestamente ejemplificadoras o como le llaman de reflexión, no sirven para nada. Eso era hace 50 años. Acá hay que asumir el compromiso y sentarse a hablar, para eso hay que poner la cara y nosotros los dirigentes estamos acostumbrados a poner la cara".
La agresión a López no es el motivo de la huelga, dijeron los árbitros. Sino que es el detonante de un cúmulo de situaciones. Al respecto, respondió: "Es su opinión, que yo sepa es el primer petitorio que yo tengo. Es la primera vez que tenemos dos reuniones. Una seria y la otra no, pero dos reuniones al fin, y la primera provocada por nosotros. No tuve antes ni un pedido, ni por nota ni verbal. Nosotros no tenemos títulos nobiliarios. Es simplemente decir juntémonos porque esto no va más. Yo creo que esto es un poco autoritario y hasta de otra época poner estos límites. Esto no es un matrimonio, sino una familia grande, tenemos que entender que podemos tener distintas opiniones".
Lo que viene
Ante el planteo de un colega sobre buscar árbitros de afuera si el conflicto sigue, contestó: "Veremos el martes o miércoles, pero no es la solución buscar árbitros de otras ligas. Yo creo que acá hay gente mal asesorada. Han tomado una medida sin tener en cuenta las consecuencias. Un paro también es una forma de violencia, sobre todo cuando se está dialogando. Si hubiesen venido a la liga y no se los hubiese atendido o ante los requerimientos se les hubiera dicho que no, sería entendible. Pero no pasó ninguna de las dos cosas, todo lo contrario. Se los citó, se charló, se les adelantaron soluciones inmediatas y otras que demandaban un tiempo mayor, y sin embargo nos encontramos con esta respuesta".
Fue muy determinante al expresar que los árbitros están mal asesorados y por eso se le preguntó al respecto, por qué entendía que sucede de este modo. "Cuando vos estás en diálogo no podés cortarlo tan abruptamente. Evidentemente, entiendo yo, que alguien los está asesorando muy mal, aunque no sé decir quién".
Pero en otro tramo de la conferencia fue mucho más terminante respecto a quienes encabezan o representan a los árbitros. "Lo que queremos que quede bien en claro, de parte ellos, si es que lo pueden hacer, es que de lo que estamos hablando es de mejorar la seguridad en las canchas, no sólo para ellos, sino para todos. Buscar soluciones conjuntas y no pretender avances gremiales en esto".
El próximo martes se desarrollará una nueva reunión de las partes, en busca de solucionar las diferencias que logren volver a la actividad futbolística en todas la canchas. Mientras tanto, será un fin de semana atípico y al fútbol de sábado por la tarde habrá que buscarlo en televisión, con los torneos de ascenso o la Eurocopa.
Con la presencia del presidente Sergio Suárez, el vicepresidente Esteban Quevedo, el secretario Marcelo Doyharzábal y el tesorero Rodolfo Prendes, la conferencia comenzó con la lectura de un comunicado que a continuación transcribimos:
"El Consejo Directivo de la Liga Santafesina, reunido en el día de la fecha en su sede de calle Corrientes 3049, expresa a la opinión pública:
1. Su más profundo rechazo a todo acto de violencia en los estadios, solidarizándonos con apoyo de distinta índole para los que la hayan sufrido.
2. Reafirmar nuestro compromiso de años trabajando en pos de erradicar de nuestras canchas todo acto de violencia, sea éste llevado adelante por público, dirigentes, técnicos, jugadores, etc.
3. Seguir trabajando en mejora de todos y cada uno de los estadios.
4. Seguir trabajando para contener a casi 1.000 chicos y jóvenes que, semana a semana, practican el deporte más popular, bregando por la continuidad de esta actividad.
5. Expresamos nuestra total disconformidad a cualquier decisión unilateral sobre adopciones de medidas de fuerza que entorpezcan las buenas relaciones necesarias para concretar soluciones, que beneficien al conjunto y no a un sector en particular, convencidos de que el diálogo y la construcción colectiva son los medios más idóneos para la superación de los conflictos.
Continuamos abiertos al intercambio de ideas y opiniones con la predisposición de siempre".
Sin conseciones
Según Sergio Suárez, este comunicado (firmado por diversos delegados de los clubes) expresa sintéticamente el pensamiento de la mayoría de los dirigentes de la Liga. Luego de la lectura del mismo, el titular liguista agregó: "Creemos que a la violencia no se la combate quedándonos en nuestras casas y esperando que surjan soluciones mágicas. Porque la mejor forma de solucionar nuestros conflictos es atacándolos. Sentados, con una posición cuasi pasiva, no sirve de nada porque luego del paro seguramente nos encontraremos sin ningún tipo de soluciones".
A su vez, explicó que en la reunión del día lunes se habían puesto puntos en común sobre la mesa y que el planteo del paro "nos ha descolocado, porque entendíamos que entre todos teníamos que buscar una solución. Acá parar el fútbol es darle de comer más a los violentos. Entendemos que esto se maneja de otra forma, no es muy ortodoxo este tipo de medidas, sobre todo cuando se trata de una forma tan unilateral. El lunes habíamos propuesto una serie de cambios y nos encontramos el día miércoles con un escrito que tenía por principio no dirigir. O sea una ruptura de diálogo y una medida que en lugar de acercar o tratar de coayudar para solucionar esto, marca una distancia mayor. Pero la situación es ésta, estamos sin fútbol, porque sin árbitros no se puede jugar y tendremos que reprogramar para más adelante la fecha de este fin de semana".
Entre los puntos sobresalientes del petitorio arbitral figura el incremento de la seguridad, tanto en los partidos de primera como de inferiores, y un mayor compromiso del Tribunal de Penas, en cuanto a las sanciones de jugadores. Al respecto, el presidente de la Liga opinó: "Todos tenemos que mejorar, todos tenemos que aceptar que una parte de culpa tenemos. Pero tenemos que tener la base en esa aceptación. Porque si no parece ser que el malo siempre es el otro y no es así. Todos tenemos falencias y la única forma de erradicar algo que está inserto en la sociedad y no en el fútbol solamente es habiendo trabajo de equipo. Este tipo de medidas, supuestamente ejemplificadoras o como le llaman de reflexión, no sirven para nada. Eso era hace 50 años. Acá hay que asumir el compromiso y sentarse a hablar, para eso hay que poner la cara y nosotros los dirigentes estamos acostumbrados a poner la cara".
La agresión a López no es el motivo de la huelga, dijeron los árbitros. Sino que es el detonante de un cúmulo de situaciones. Al respecto, respondió: "Es su opinión, que yo sepa es el primer petitorio que yo tengo. Es la primera vez que tenemos dos reuniones. Una seria y la otra no, pero dos reuniones al fin, y la primera provocada por nosotros. No tuve antes ni un pedido, ni por nota ni verbal. Nosotros no tenemos títulos nobiliarios. Es simplemente decir juntémonos porque esto no va más. Yo creo que esto es un poco autoritario y hasta de otra época poner estos límites. Esto no es un matrimonio, sino una familia grande, tenemos que entender que podemos tener distintas opiniones".
Lo que viene
Ante el planteo de un colega sobre buscar árbitros de afuera si el conflicto sigue, contestó: "Veremos el martes o miércoles, pero no es la solución buscar árbitros de otras ligas. Yo creo que acá hay gente mal asesorada. Han tomado una medida sin tener en cuenta las consecuencias. Un paro también es una forma de violencia, sobre todo cuando se está dialogando. Si hubiesen venido a la liga y no se los hubiese atendido o ante los requerimientos se les hubiera dicho que no, sería entendible. Pero no pasó ninguna de las dos cosas, todo lo contrario. Se los citó, se charló, se les adelantaron soluciones inmediatas y otras que demandaban un tiempo mayor, y sin embargo nos encontramos con esta respuesta".
Fue muy determinante al expresar que los árbitros están mal asesorados y por eso se le preguntó al respecto, por qué entendía que sucede de este modo. "Cuando vos estás en diálogo no podés cortarlo tan abruptamente. Evidentemente, entiendo yo, que alguien los está asesorando muy mal, aunque no sé decir quién".
Pero en otro tramo de la conferencia fue mucho más terminante respecto a quienes encabezan o representan a los árbitros. "Lo que queremos que quede bien en claro, de parte ellos, si es que lo pueden hacer, es que de lo que estamos hablando es de mejorar la seguridad en las canchas, no sólo para ellos, sino para todos. Buscar soluciones conjuntas y no pretender avances gremiales en esto".
El próximo martes se desarrollará una nueva reunión de las partes, en busca de solucionar las diferencias que logren volver a la actividad futbolística en todas la canchas. Mientras tanto, será un fin de semana atípico y al fútbol de sábado por la tarde habrá que buscarlo en televisión, con los torneos de ascenso o la Eurocopa.
Análisis
Se confunde
Por Enrique Cruz (h)
Mucho es lo que hizo, hace y hará Sergio Suárez por la Liga, pero convengamos que expresa cierta confusión con sus declaraciones y con un comunicado que pretende desviar la atención de un problema grave que va mucho más allá de jugar o no jugar al fútbol un fin de semana.
La medida de fuerza de los árbitros no responde a una decisión de tipo gremial. Ni siquiera se los menciona (a los gremios) en el comunicado que dieron a conocer el miércoles. Es una medida corporativa en defensa de una salvaje agresión a uno de sus colegas, que no debe tomarse Äla agresiónÄ como un hecho aislado sino como la gota que rebasó el vaso de una serie de hechos que se vienen suscitando y que conspiran contra la sana intención de esfuerzo y crecimiento liguista que pregonan sus dirigentes y que, seguramente, en muchos de los casos se concretan, aunque no en todos.
Se ha pretendido, a través del comunicado, desviar la atención para centrarlo en un supuesto choque de intereses o de disputa sectorial, que, en realidad, en ningún momento animó a los árbitros, voluntaria y genuinamente reunidos en su totalidad para defender a su colega.
No tiene que pelearse la Liga con los árbitros, ni viceversa. Juntos tienen que aportar soluciones pero, sobre todas las cosas, ponerse codo a codo para defenestrar este tipo de hechos que manchan de una manera que ni ellos mismos se imaginan, el buen nombre, prestigio, cariño, esfuerzo y dedicación de esos más de miles que esperan el sábado para vivir, desde el lugar que eligieron, el fútbol lugareño.
Mucho es lo que hizo, hace y hará Sergio Suárez por la Liga, pero convengamos que expresa cierta confusión con sus declaraciones y con un comunicado que pretende desviar la atención de un problema grave que va mucho más allá de jugar o no jugar al fútbol un fin de semana.
La medida de fuerza de los árbitros no responde a una decisión de tipo gremial. Ni siquiera se los menciona (a los gremios) en el comunicado que dieron a conocer el miércoles. Es una medida corporativa en defensa de una salvaje agresión a uno de sus colegas, que no debe tomarse Äla agresiónÄ como un hecho aislado sino como la gota que rebasó el vaso de una serie de hechos que se vienen suscitando y que conspiran contra la sana intención de esfuerzo y crecimiento liguista que pregonan sus dirigentes y que, seguramente, en muchos de los casos se concretan, aunque no en todos.
Se ha pretendido, a través del comunicado, desviar la atención para centrarlo en un supuesto choque de intereses o de disputa sectorial, que, en realidad, en ningún momento animó a los árbitros, voluntaria y genuinamente reunidos en su totalidad para defender a su colega.
No tiene que pelearse la Liga con los árbitros, ni viceversa. Juntos tienen que aportar soluciones pero, sobre todas las cosas, ponerse codo a codo para defenestrar este tipo de hechos que manchan de una manera que ni ellos mismos se imaginan, el buen nombre, prestigio, cariño, esfuerzo y dedicación de esos más de miles que esperan el sábado para vivir, desde el lugar que eligieron, el fútbol lugareño.
Fuente: diario El Litoral
No hay comentarios:
Publicar un comentario