COMENTARIO UNIÓN (MAR DEL PLATA) - GIMNASIA

Primer partido por la promoción

Gimnasia no tuvo un feliz domingo

El conjunto de Ciudadela perdió por 3 a 1 ante Unión de Mar del Plata. Careció de contundencia y ahora debe ganar por dos goles en la revancha, para mantener la plaza en el Argentino B.

Aquel que sólo se quede con el resultado de la planilla, seguramente dirá que Gimnasia cayó sin atenuantes en Mar del Plata. Sin embargo, el tanteador del partido no es fiel reflejo de la realidad. El encuentro fue mucho más parejo y la diferencia resulta exagerada. Sobre todo porque el tercer gol de Unión fue en clara posición adelantada. Justo un golpe letal, en el mejor momento del "Pistolero".
Aunque si se entra en el análisis más minucioso, se encontrarán motivos por los cuales la derrota tiene sus argumentos. El primero de ellos fue que el equipo no tuvo un funcionamiento compacto. Los laterales fueron los sectores elegidos por el local para crear peligro durante el primer tiempo. El segundo fue la inconstancia que tuvo durante el juego. Si bien por momentos fue el dominador de las acciones, en otros le costó hacerse dueño de la pelota. El tercero, y quizás más determinante, cumple con aquella vieja frase futbolera de "goles errados, goles en contra". Porque Gimnasia careció de eficacia a la hora de plasmar en la red las oportunidades que generó. Sin embargo, su rival sí tuvo esa capacidad y ahí radica la justificación de la victoria.
Pero también hay que destacar un cuarto punto. Cuando el equipo santafesino se quedó con un jugador menos, quien falló en la puntería fue Unión y por eso la diferencia no fue mayor. También porque el conjunto marplatense cerró el partido conformándose con el 3 a 1. Dos goles de diferencia, que no serán fáciles de remontar, aunque es una brecha que no es imposible de acortar, dado que ante igualdad de goles, la ventaja deportiva corresponde al equipo de Ciudadela.

No lo liquidó
El partido tuvo dos hechos significativos antes de su comienzo. El primero, el cambio de árbitro, dado que Marcelo Arredondo no pudo arribar desde General Pico y por eso Jofre, quien era línea uno, asumió su lugar. Pero, dentro del equipo "Pistolero", la mala noticia llegó en el calentamiento previo: Jorge Sniadowsky se lesionó antes de empezar el partido (una contractura) y no pudo ser de la partida, obligando al ingreso de De Sanctis y el corrimiento de Franklin para marcar punta por la derecha.
La primera chance de gol se produjo al minuto y medio, cuando Alberdi remató desde afuera del área y la pelota se fue a centímetros del palo derecho de Arduini. Pero Unión no quiso ser menos y Jorge Gómez, una vez que le ganó la espalda a Rizzi, obligó la intervención de Vagliente, un cuarto de hora después. A la mejor jugada colectiva del partido le faltó el toque final, cuando Franklin mandó el centro y un defensor alcanzó a sacarla al corner. Más tarde, Manassero la pasó para Alberdi y el ex Ateneo le puso un pase gol a Chiaraviglio, que remató desviado.
En el ida y vuelta, Jorge Gómez ganó por la banda izquierda y, tras un centro pasado, Cuevas devolvió gentilezas, porque estaba solo frente al arco y, con Vagliente superado, mandó la pelota afuera. La intensa lluvia del sábado, la del mismo domingo por la madrugada y la que, por momentos, cayó durante el partido, hicieron que el campo de juego no fuera muy bueno. Por lo que el partido por momentos se hizo muy trabado y cortado, con muchas faltas que impidieron un juego continuo.
En los minutos finales, el "Celeste" apretó el acelerador. Primero el "Príncipe" se lució en dos tapadas fenomenales, pero un mal cálculo de Franklin lo dejó solo a Cuevas para establecer su primer gol en la fría mañana marplatense.

Historia repetida
Como un calco del primer tiempo, al minuto y medio llegó el primer susto para Arduini: Chiaraviglio mandó el centro y, tras un error del guardameta, Garancini no pudo conectar para empatar el partido. Los Gómez se combinaron y, tras un centro de José, fue Jorge Gómez quien estiró cifras, en la primera llegada del complemento del equipo de Pintado.
Chiaraviglio tuvo el descuento, pero los delanteros de Gimnasia adolecen de gol y eso es mucha ventaja en estas instancias. El ingreso de Bertozzi le dio mayor cambio de ritmo y velocidad al mensana, y en la primera intervención del "Toto" le cometieron el penal, que Zeballos transformó en el descuento. La sensación que se transmitía desde el rectángulo de juego era que ese gol fue la inyección anímica que necesitaban los dirigidos por Oyeras.
Nuevamente Bertozzi le trajo dolores de cabeza a los centrales, con un remate sin puntería y otro a la carrera, que llegó débil a las manos del arquero. Chiaraviglio volvió a tener servido el gol, pero tras el centro de Goette, le erró a la pelota, desperdiciando la chance más clara para empatar.
Con el equipo totalmente jugado en ataque, la salida por la izquierda de Unión derivó en el tercero del local. Aunque Cuevas estaba en off side, fue muy claro el fallo en los relevos, lo que le permitió a Alioto hacerse del balón para encabezar el contragolpe.
"Peor hubiese sido perder por más goles y siendo superados" fue el primer mensaje del "Sapo" en el vestuario de Gimnasia. "Demostramos que podemos lastimarlos, sólo falta que la metamos", fue otra de las frases que les dijo a sus dirigidos, como para mantener la autoestima en alto.
La revancha en Santa Fe será el último partido de la temporada. Se necesitan dos goles de diferencia para quedarse en el Argentino B. Tarea complicada, pero no imposible de conseguir, dado que Unión demostró que, si se lo ataca, puede ser vulnerado. Pero como dijo el propio Miguel Oyeras, sólo falta meterla en el arco.

Julián Andrés Monzón

Fuente. diario El Litoral

Foto. diario La Capital de Mar del Plata