La llegada de Patronato a la Primera B Nacional tuvo que ver con el sacrificio de muchos. Entre ellos Claudio Weinzettel que integró los planteles del Rojinegro que ascendieron del Argentino B al A y posteriormente a la segunda categoría del fútbol del país. Con Ricardo Zielinski como DT fueron pocos los minutos que el oriundo de Santa Elena tuvo en cancha y desde el retorno de Marcelo Fuentes ni siquiera fue considerado.
Ante esta situación, que está dentro de las reglas del fútbol, el defensor se marchó para jugar el Torneo Argentino B, a Guaraní Antonio Franco. Retornado desde el club misionero, sin lugar en Patrón, le surgió en diciembre la chance de emigrar a Belgrano para jugar el Torneo del Interior.
El Mondonguero le da la chance de tener la continuidad que todo jugador necesita, pero a 16 días del inicio del certamen , el defensor se encuentra con una serie de exigencias de parte de la dirigencia Santa que dificultan su traspaso a la institución de Salta y Nogoyá.
Weinzettel tiene contrato hasta junio en Patronato: “Hablé con José Gómez y me dijo que para que pueda ir a Belgrano tengo que rescindir el contrato con Patronato, que vence en junio”.
El defensor no tendría inconvenientes en acceder al reclamo, pero hubo una petición más de parte del presidente: “Me pidió que renuncie a una deuda que mantienen conmigo por incumplimiento de pago. No veo por qué tengo que hacer esto si es algo que me gané lealmente. El monto para muchos puede ser insignificante, pero a mi me hace falta. Juegan con mi necesidad y la de mi familia”, remarcó.
“La verdad que estoy un poco amargado por todo esto. Bien o mal siempre di todo por el club y fui protagonista de los logros más importantes del club en los últimos años. Si no tengo lugar en Patronato, por qué me ponen trabas para ir a otro lado”, prosiguió.
De los pasos a seguir, anunció: “Voy a intentar volver a hablar con el presidente o con Tito Hollman –vicepresidente primero– a quien considero una gran persona. No quiero irme mal del club, ni caer en la necesidad de una demanda judicial, pero si es necesario haré una consulta en agremiados. Solamente reclamo lo que me pertenece”.
Por último el zaguero, que sigue entrenando en el Mondonguero, volvió a mostrar su disconformidad por el trato recibido: “La verdad que siento que me han tratado muy mal como jugador y sobre todo como persona. No creo merecerme esto, como tampoco se lo merecían otros jugadores que prácticamente a pesar de que fueron importante fueron echados y se fueron por la puerta de atrás del club”, culminó.
Diario Uno (Paraná)
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