Que viva el fútbol

Que viva el fútbol

domingo, 12 de abril de 2009




Una multitud afuera y muchas ganas adentro para llegar a la punta
Sobraron sábalos y huevos en las Pascuas de Colón
Un golazo con pegada maradoniana de Oyola y una noche perfecta del arquero Pozo salvaron el invicto en Santa Fe para llegar a la punta del campeonato
-
Darío Pignata

La gente y las ganas. Pozo y Oyola. Arsenal y Pompei. Se puede explicar el indiscutido 1 a 1 de anoche de varias formas. Sin un arquero iluminado como Colón tuvo ayer, perdía seguro. Sin un ejecutante infalible desde esa posición y en ese arco —lo embocó desde allí a Jujuy—, la noche se hubiera complicado más de lo que se complicó. Arsenal fue más “jodido” de lo que muchos esperábamos y Pompei fue más parcial de lo que suponíamos.
Así y todo, el equipo se fue ovacionado y el arquero casi sacado en andas. ¿Qué decir de Colón? Nada que no se hubiera escrito en estas ocho fechas anteriores y que se ratificó en la novena. Este equipo de Mohamed empieza a ser una deliciosa naranja exprimida al máximo, que da todo lo que tiene y un poco más también. Por eso, más allá que el 1 a 1 no llena, el aplauso se multiplica por 25.000. La ecuación fue perfecta: 50.000 manos ruidosas sacuden el aire del Cementerio. No hubo elefantes enfrente, pero Pompei lo cuidó a Arsenal más que a un grande. Ante la duda, le dio un penal desde la mitad de la cancha (ya sólo por eso, por estar a 50 metros, debería ser “parado” en AFA) y protagonizó un diálogo increíble con Gilberto Tadeo, juez asistente número 1:
Gilberto Tadeo (Árbitro Asistente): -“Juan, el 10 de Arsenal le metió un cortito al jugador de Colón que está en el piso...”
Juan Pablo Pompei (Juez Principal): -“No lo voy a echar por eso...”
Así, después de la trompada en la cara de Ferrero adelante de todos, Colón entendió en el arranque del complemento que tenía adentro de la cancha todo en contra: 1) perdía 1 a 0 de local; 2) Arsenal estaba bien parado para manejar esa ventaja; 3) Tenía un árbitro enfrente dispuesto a proteger al rival de Sarandí.

Doce contra 12
Lo mejor del partido, por la vibración futbolística que le puso Colón, fueron esos primeros 20 minutos del complemento. Justo hasta que el balón de Oyola se puso de novio con la red de Campestrini y firmó casamiento con el 1 a 1. Por izquierda, con el tándem Rivarola-Oyola, Colón lo empezó a abrir a Arsenal. Ya el “Turco” se la había jugado, dejando tres atrás, sacando a “Pirulo” para empezar a viajar y tres puntas arriba.
Se lo sacaron a Ramírez de la línea —buen y único aporte de Daley Mena en toda la noche con un perfecto centro atrás— y a Prediger de lejos. Se jugaba en el campo de Arsenal, con una fiera defensiva como Alexis Ferrero: mano a mano y estando amonestado, ganó todo.
Hubo un pasaje inolvidable de la noche: mientras Arsenal jugaba con 12 porque Pompei parecía uno más de Sarandí con sus fallos, el cemento del Cementerio sufrió un temblor, pero de los lindos. Porque todas las almas empezaron a empujar a Colón contra Campestrini. Entonces, Colón también inventó a su jugador número doce: la gente, su hinchada, el pueblo. “Sabalé... Sabalé... te vinimos a ver...”. Estruendoso, conmovedor, emocionante. Allí, el golazo de Oyola fue el “chán... chán” como remate del mejor de los tangos en el Brigadier.
Después de esa tormenta de ganas y amor propio, volvió la calma. Porque Colón aflojó y Arsenal respiró. O porque Arsenal salió del fondo y Colón sintió el desgaste de esos 20 minutos sin pausas.
El “Turco” Mohamed, en el planteo inicial, intentó lastimarlo a Arsenal con Sciorilli de enganche. Se la jugó, le salió mal. Porque dejó el centro del campo muy abierto y, más allá de otro partido completo de Prediger, el tándem Casteglione-Pellerano marcó el territorio con oficio. Pero, además, al sacarlo a Sciorilli de la banda y abrirlo a Ramírez, le facilitó al escurridizo Poggi para que hiciera estragos. Conclusión: Sciorilli de enganche no la tocó y Ramírez perdió el duelo con Poggi.
La “soledad” de Prediger se vio en un correr para todos lados. Entonces, esta vez y por única vez, aparecieron espacios entre los volantes y la zaga, algo que la dupla Leguizamón-Jara aprovechó a la perfección. Por eso a Colón le hicieron un gol, le patearon un penal y su arquero Pozo sacó tres pelotas de película.

Campeón en amor propio
Sin solidez, Colón siguió buscando igual los tres puntos. Se acomodó un poco cuando entró Lucas Acosta a “volantear” y salió Mena. Si no lo perdió en la última bola de la noche fue gracias a una tapada increíble de Pozo. El 1 a 1 dio paso a los aplausos. Es que el hincha, que siempre quiere todo (anoche era ganar y quedar solo en la punta sin depender de nadie), se da cuenta que este equipo es una naranja exprimida al máximo por Mohamed. Deja todo. Hasta la última gota de jugo. O de sudor. Colón juega como vive la mayoría de los que van a la cancha: peléandola siempre y sin bajar los brazos. A veces alcanza... a veces no. Lo que está claro es que siempre muere en el intento.
///
SÍNTESIS
COLÓN 1 - ARSENAL 1
Colón: Diego Pozo; Salustiano Candia, Alexis Ferrero, Marcelo Goux, Germán Rivarola; Sebastián Sciorilli, Alfredo Ramírez, Sebastián Prediger, Matías Oyola; Daley Mena y Esteban Fuertes. DT: Antonio Mohamed.
Arsenal: Cristian Campestrini; Sergio Sena, Hugo Nervo, Aníbal Matellán, Javier Yacuzzi; Sebastián Carrera, Cristian Pellerano, Carlos Casteglione, Federico Poggi; Luciano Leguizamón y Franco Jara. DT: Daniel Garnero.
Gol en el primer tiempo: a los 44 minutos Jara (A).
Gol en el segundo tiempo: a los 21 minutos Oyola (C).
Cambios: en el segundo tiempo, a los 16 minutos, Fabián Castillo por Sciorilli (C) y Alejandro Capurro por Ramírez (C); a los 18, Mauro Matos por Jara (A); a los 23, Darío Espínola por Poggi (A); a los 35, Lucas Acosta por Mena (C); a los 37, Nicolás Aguirre por Carrera (A).
Incidencias: en el primer tiempo, a los 12 minutos, Pozo (C) le contuvo un penal a Leguizamón (A).
Árbitro: Juan Pablo Pompei.
Cancha: Colón.
-
Diario El Litoral

No hay comentarios:

Publicar un comentario