Que viva el fútbol

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domingo, 22 de junio de 2008

Ampliamos sobre el descenso de Gimnasia


Torneo Argentino B

Gimnasia descendió en Ciudadela
Pese a ganar el partido de vuelta por la promoción, ante Unión de Mar del Plata, no pudo lograr los dos goles de diferencia que necesitaba para torcer el marcador global. Así, el "Pistolero" jugará la próxima temporada en el Torneo del Interior.

Julián Monzón



El partido era complicado desde antes de jugarlo. Pese a que sobraba confianza en dar vuelta la serie, Gimnasia debía ganar por dos goles de diferencia, algo que sólo había logrado en tres partidos de los 29 jugados anteriormente. Por si fuera poca la presión, a tan sólo 4 minutos del inicio ya perdía ante el equipo marplatense. Desde ese entonces, ya estaba obligado a marcar tres tantos y evitar que Unión le convirtiera otro gol.
El aluvión de los quince minutos posteriores al tanto de Cuevas, le permitieron al "Pistolero" dar vuelta el resultado. Sólo faltaba lograr la diferencia necesaria para empatar el global y lograr la permanencia, dado que ante la igualdad de puntos y goles contaba el equipo de Oyeras con ventaja deportiva. Sin embargo, y aunque le sobraron situaciones favorables, volvió a fallar en la puntería, tal cual había ocurrido hace una semana en Mar del Plata. Luego, en el complemento, el nerviosismo, el cansancio y la impotencia, jugaron su partido.
Así como el conjunto de Ciudadela pudo haber logrado el gol de la salvación, también la visita contó con chances para igualar el partido. Lo cierto fue que el final del encuentro tuvo a los jugadores visitantes festejando el ascenso y a los locales con la frustración de haber perdido la categoría.

Todo cuesta arriba
La idea de juego que había preparado Miguel Oyeras era muy clara: salir a "matar" de entrada, tratando de explotar las debilidades defensivas que se vieron en Unión hace una semana. Por eso, armó línea de tres en el fondo, con el "Negro" Sniadowsky como volante y con Manassero más adelantado para juntarse con Alberdi y así abastecer a los puntas.
Pero en el primer ataque del equipo de Pintado, Gimnasia pagó carísimo un error al tomar las marcas: Jorge Gómez desbordó por la izquierda, se fue metiendo al área y, cuando mandó el centro, la pelota dio en la mano de Zeballos. Algunos discutieron la falta de intención del volante, pero lo cierto es que claramente desvió la pelota y el árbitro por eso la juzgó intencional. Martín Cuevas no tuvo ni un reparo en transformar el penal en el gol de apertura del marcador y así el equipo santafesino estaba obligado a convertir tres goles para salvarse del descenso.
La tranquilidad llegó al noveno minuto de juego, cuando Goette, desde el borde del área, clavó un "cañonazo" inatajable para Arduini. Con el partido empatado, todo volvía a foja cero y los dirigidos por el "Sapo" Oyeras buscarían la hazaña de torcer el rumbo. Garancini de cabeza casi marca el segundo, pero la pelota se fue por encima del travesaño. Unión decidió aguantar la embestida de su rival y tratar de sorprender de contragolpe. Así, Moreyra probó suerte desde lejos y la pelota se fue desviada.
Pero la gran figura de la tarde tuvo su premio al marcar el gol de la esperanza. Sandoval armó una muy buena jugada personal por la derecha y, tras mandar el centro, Sniadowsky puso de cabeza el segundo de Gimnasia. En veinte minutos, sucedió de todo. Desde afuera era un verdadero "partidazo", aunque obviamente que para los intereses santafesinos faltaba aún seguir estirando la diferencia.
Un sinnúmero de situaciones generadas bien pudieron darle esa merecida ventaja. Primero Sandoval y luego Chiaraviglio forzaron despejes desesperados de los defensores marplatenses. Este último casi desde la línea, cuando Domínguez salvó la tercera caída de su arco. Fueron momentos en los que se pensó que el tercero estaba al caer en cualquier momento. Sobre el final Unión avisó que no estaba de mero espectador y casi logró empatar, primero con un remate de Cuevas, desde casi 35 metros, que pegó en el travesaño, y luego con un pase de Jorge Gómez que el propio Cuevas mandó varios metros por encima del horizontal.

Otro partido
En el complemento, ese constante hostigamiento sobre el adversario no fue tal. Gimnasia tuvo un cuarto de hora inicial en el cual no logró crear situaciones en el arco de Arduini. Luego comenzaron los contratiempos, y así Sniadowsky se resintió de su contractura y tuvo que salir de la cancha, aunque el ingreso de Bertozzi sirvió para darle una variante ofensiva a un mediocampo que ya era controlado por el rival.
Sobre la media hora del encuentro, un desborde de Sandoval terminó con el centro buscapié que despejó Fortunato. Pero en la contra Jorge Gómez estrelló un remate en el palo, el segundo del partido para la visita. Desde ahí en adelante fue palo y palo. El "Pistolero" iba con todo y se desprotegía atrás.
Otra vez Gómez, con Vagliente ya fuera de acción, mandó la pelota afuera. Guillermo González le quemó las manos al arquero visitante y sobre el final casi llegó el milagro. Un centro desde la derecha fue conectado por Marchini y Piedrabuena empujaba la pelota a la red, pero el centro había salido del campo de juego antes de impactar en el defensor.
El pitazo final de Márquez dejó, como era de esperarse, la frustración para el mensana y el festejo para Unión. Pero Gimnasia no desciende solamente porque ayer no convirtió otro gol. Pierde la categoría por un cúmulo de situaciones que se vienen dando a lo largo de todo el torneo, algo que analizaremos más extensamente en la semana.
Ayer vendió cara la derrota, pero un campeonato se compone de mucho más que dos partidos en los que hay un ganador y un perdedor. Gimnasia jugó antes de esta promoción 28 encuentros para intentar escaparle a la caída. La tardía llegada del "Sapo" Oyeras sacó al equipo del descenso directo y lo plantó en esta posibilidad de permanencia.
La dirigencia deberá saber que también tiene su gran cuota de responsabilidad en este fracaso. Como también la tiene el cuerpo técnico anterior. Porque es cierto que a los partidos los ganan o pierden los jugadores, pero como suele decirse, en un equipo hay tres patas fundamentales: los propios futbolistas, el cuerpo técnico y los dirigentes.



Síntesis
Gimnasia 2 - Unión 1
Gimnasia: Vagliente (5); Garancini (6), Marchini (6), Rizzi Oliveira (5); Sniadowsky (8), Manassero (6), Zeballos (7), Goette (6), Alberdi (6); Sandoval (6), Chiaraviglio (5).
D.T: Miguel Oyeras.
Unión: Arduini (5); Domínguez (5), Zabala (6), Fortunato (5), Damboriana (5); Felices (5), Leonardo Gómez (7), Collantes (5), Moreyra (6); Cuevas (6) y Jorge Gómez (6).
D.T: José Pintado.
Goles: en el primer tiempo, a los 4 min. Cuevas de penal (U), a los 9 min. Goette (G) y a los 19 min. Sniadowsky (G).
Cambios: Bertozzi (7) por Sniadowsky, González por Manassero y Piedrabuena por Alberdi (G); Fittipaldi (6) por Domínguez y Biondo por Cuevas (U).
Cancha: Gimnasia.
Árbitro: Flavio Márquez (Federal).


El vestuario en frases
* "Enfrentamos a un gran equipo, nos costó mucho mantener la ventaja lograda en la ida, pero logramos hacerlo y es una alegría enorme para todos nosotros. Gimnasia fue un rival durísimo, que juega muy bien al fútbol, pero por suerte podemos festejar este ascenso". Martín Cuevas, delantero de Unión.
* "Cuando terminó el partido, me sentí mal, con bronca. Tenía la esperanza de lograr el objetivo, pero se terminó todo. Tendré que resignarme y tendremos los dirigentes que asumir la parte de culpa que nos corresponde". Martín Álvarez, presidente de Gimnasia.
* "Me sentí triste y amargado, con toda la bronca por no poder terminar el partido por la lesión que tuve. Pero salí con la cabeza en alto, porque dejé todo por Gimnasia y por los muchachos que jugaron al lado mío". Jorge Sniadowsky, jugador de Gimnasia.
* "Estoy muy amargado porque confiaba muchísimo en los muchachos y te lo había dicho en la semana. Los había visto entrenar, había visto el estado de ánimo que tenían y yo estaba seguro de que daban vuelta el resultado. Lamentablemente nos faltó un gol. El gol en off side de la semana pasada nos complicó de visitante y acá pesó. Pero como entrenador y como ser humano estoy muy satisfecho por la entrega del equipo. Les dije que estaba muy orgulloso de ellos, y que este tipo de derrotas nos tiene que servir para que en el futuro no esperemos hasta lo último para meter todo lo que metieron en estos dos partidos". Miguel Oyeras, técnico de Gimnasia.


Partido demorado.
El encuentro comenzó casi 50 minutos más tarde. ¿El motivo? No había llegado el médico y el árbitro se negó a empezar el partido hasta tanto llegue algún facultativo. Se llamó a un reemplazo, pero eso ocasionó la demora. Además, la semana pasada el árbitro principal fue cambiado, porque el titular no había llegado a destino, producto de los cortes de ruta. Ayer también hubo un cambio de última y el mendocino Alejandro Arco no fue quien vino a Santa Fe. En su reemplazo llegó Flavio Márquez. Según manifestó el propio Márquez, él se enteró el jueves por la noche de la designación y, por lo que pudo averiguar, Arco estaba enfermo.


Segundo año.
Por segundo año consecutivo, diario El Litoral fue el único medio periodístico santafesino que cubrió la totalidad del Argentino B, junto a Gimnasia. Fueron 30 partidos, en los cuales hubo análisis, notas y opiniones. Algunas generaron el disgusto de varias personas, pero cumplimos con el rol primordial de acompañar al representante de la Liga Santafesina, expresando nuestra crítica, ya sea favorable como también adversa.



Fuente: diario El Litoral

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